Macho y hembra
Los testículos del toro y los ovarios de la vaca producen
las células reproductoras por una serie de divisiones celulares que separan el
número de cromosomas en una célula. El espermatozoide y el óvulo contienen
solamente un miembro del par de cromosomas. Por lo tanto, las células de la
vaca y del toro contienen 60 cromosomas (2n = 60), pero el espermatozoide en el
semen y el óvulo en los ovarios contienen solamente 30 cromosomas (n=30). Los
dos principios básicos de la transmisión de un rasgo (ejemplo, sexo) son los
siguientes:
1) Separación de los pares de cromosomas durante la
formación de las células reproductoras.
2) Unión del espermatozoide con el óvulo para crear una
nueva célula con un conjunto único de cromosomas.
Para 29 pares de cromosomas, ambos miembros son visualmente
idénticos. De todas formas, para uno de los pares, un miembro es mucho más
largo; es llamado cromosoma X, y el miembro más corto es llamado cromosoma Y.
Todos los óvulos llevan el cromosoma X, pero el espermatozoide puede llevar el
cromosoma X o el Y. Durante la división celular para formar las células
reproductoras, cada miembro del par de cromosomas va hacia una célula por
separado. Como resultado, 50% de los espermatozoides llevarán el cromosoma X y
el otro 50%, el cromosoma Y. Si por casualidad un espermatozoide que lleva el
cromosoma Y fertiliza un óvulo, la descendencia será macho. Si la descendencia
recibe dos cromosomas X, se desarrollará una hembra. Es importante darse cuenta
que es imposible predecir el sexo de la descendencia al momento del
apareamiento (inseminación); aun así, podemos predecir que, en promedio, 50% de
la descendencia serán machos y 50% hembras.
Rasgos cualitativos
Los rasgos cualitativos tienden a caer dentro de categorías
discretas. Generalmente solo uno o unos pocos genes poseen un gran efecto sobre
los rasgos cualitativos. El medio ambiente tiene generalmente un pequeño papel
al influenciar la categoría dentro de la que el animal cae. En este caso, el
fenotipo de un animal refleja su genotipo. Ejemplos de rasgos cualitativos son:
• Color de pelo.
• Defectos hereditarios como enanismo.
• Presencia o ausencia de cuernos.
• Tipo sanguíneo.
Rasgos cuantitativos
Los rasgos cuantitativos difieren de los cualitativos de dos
formas importantes:
1) Se encuentran influenciados por muchos pares de genes.
2) La expresión fenotípica es influenciada más fuertemente
por el medio ambiente que en el caso de los rasgos cualitativos. Muchos de los
rasgos de importancia económica importante en el ganado lechero son
cuantitativos:
• Producción de leche.
• Composición de la leche.
• Conformación (también llamado tipo).
• Eficiencia de conversión de alimento.
• Resistencia a enfermedades.
La influencia combinada de muchos genes y el efecto del
medio ambiente en los rasgos cuantitativos hacen que sea mucho más difícil el
determinar el genotipo exacto que en el caso de la mayoría de los rasgos
cualitativos.
Algunas veces, el fenotipo del animal nos dice muy poco
acerca de su genotipo. Por ejemplo, un registro de lactancia solamente dice una
fracción de la información acerca del mérito genético de la vaca para
producción de leche.
¿Qué hace que el genotipo de una vaca sea único?
Cuando se forman los óvulos, ellos reciben uno de los dos
miembros del par de cromosomas. Por lo tanto, un cromosoma en particular en un
óvulo puede ser el primer o el segundo miembro del par de cromosomas de los
padres. Existen solamente dos tipos de óvulos para un gen en particular. Si en
lugar de un par de cromosomas, consideramos dos, ¿cuál es el número de
diferentes óvulos? En otras palabras, ¿cuál es el número total de combinaciones
cromosómicas posibles? La situación es la misma que la de arrojar dos monedas
al mismo tiempo. El número de posibles combinaciones es: dos posibles valores
para la primera moneda multiplicado por los dos posibles valores de la segunda
= 2 x 2 = 22 = 4 diferentes posibilidades. El número de diferentes genotipos
para un óvulo es cuatro y la probabilidad de una combinación en particular de
cromosomas es de 1/4. Esto es también verdad para el número de posibles
genotipos en las células reproductoras masculinas. Por lo tanto, cuando uno de
cuatro posibles clases de espermatozoides fertiliza uno de cuatro posibles
combinaciones de óvulos el número de descendientes genéticamente diferentes es
4 x 4 = 16 (ejm., 22 x 22). Por lo tanto, las chances de que un genotipo en
particular se presente en el recién nacido es 1/16.
Cuando los 30 pares de cromosomas del ganado lechero se separan
durante la formación de las células reproductoras y luego se vuelven a unir en
el momento de la fertilización, el número total de posibles combinaciones
cromosómicas es 230 x 230 = 1.152.900.000.000.000.000, cada uno siendo único.
Con este número de posibilidades para cada apareamiento, es fácil entender por
qué dos individuos no son iguales en una población, aun cuando tengan el mismo
padre.
FUENTE: Instituto Babcock para la Investigación y Desarrollo
Internacional de la Industria Lechera. Esenciales Lecheras. Universidad de
Wisconsin-Madison.
Análisis de Cruz Alcides Alvarado Guerra.
Imagen: Propia de Cruz Alcides Alvarado Guerra.